… “la belleza es el orden en su esplendor”. Aristóteles
… “la belleza es el esplendor de la idea”. Hegel
… “la belleza es lo que da placer a los ojos.” Santo Tomás
… “la belleza es el lenguaje que Dios usa para comunicarse con las personas”
Miguel Ángel Buonarroti

Quien diga que el espacio y el tiempo no se las traen… que se vuelva a su casa…

En algún punto de la línea espacio/tiempo, algo se traba, y rompe el tiempo. Esto que pasa, ya ha pasado, porque parte de la fuerza del tiempo es su repetición. Y en el aprendizaje entre la reacción y la elección, y la decisión y la interpretación, elegimos piedras, que parecen perlas, pero no lo son. Y volvemos a tropezar.

La cirugía plástica es la más bella y noble de todas las artes. Sin embargo, el desacierto de muchos audaces e improvisados al ejercerla, y la apreciación de muchos profanos para juzgarla, hace que muchas veces no sea valorada como se merece. Es allí cuando el diablo mete su cola, y el juego de los egos comienza a rodar. Hasta el más hábil y talentoso de los cirujanos pierde grandeza cuando pierde humildad. Comienzan las disputas, las críticas, que cuando no son constructivas, son destructivas, perdemos fuerza, perdemos unión, perdemos nuestro espacio… y hablamos de intrusismo. Cuando escucho a algunos colegas cómo combatirlo, y elaboran estrategias de marketing y publicidad, pienso… ¿no es más fácil reconocer su origen?

No hablemos más de intrusismo, hablemos de arte, de belleza, de nosotros mismos, del artista que llevamos dentro, que es lo que tenemos en común, lo que nos une y nos fortalece. De la capacidad de generar emociones con nuestro trabajo. Para mí, esa emoción, cuando recrea y regocija el alma, es la belleza. Esa especial energía que nos conecta.

Si aprendemos a ver, no veremos un mundo de objetos, solo el resplandor de sus emociones. Yo elijo ser parte de ese resplandor.

Dra. Georgia Martínez
Editora de Revista Argentina de Cirugía Plástica

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El intrusismo, el arte y la belleza

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